CONTROL: por unos segundos sonará la música de presentación e identificación del cuento. Se hará presentación del mismo. Esta permanece en un tercer plano durante todo el relato.
NARRADOR: hace mucho tiempo cuando había lindas hadas y brujas traviesas vivía un rey muy bueno que tenia unas hijas lindísimas, sobre todo la menor, era tan bonita que hasta el sol se sonreía cuando se posaba en sus dorados cabellos. Junto al lindo palacio donde vivía la princesita, extendiese un bosque muy grande, lleno de árboles y muy oscuro. En medio de ese bosque había una gran laguna y cuando hacia mucho calor la princesita se sentaba en sus orillas y se aburría se ponía a jugar con su pelota de oro.
CONTROL: por unos segundos sonará la música suave, un vals de princesas.
PRINCESITA: (en un tono bajo) papito, papito estoy muy aburrida, ya no encuentro nada que hacer en el castillo.
REY: pero hijita, puedes jugar y correr por todas las habitaciones del palacio, pídele a los sirvientes que te preparen tus platillos favoritos o puedes recoger las flores del jardín…
PRINCESITA: pero eso ya lo hice, porque no me das mi pelotita de oro, quisiera jugar con ella.
REY: esta bien, pero recuerda que la debes cuidar muy bien, ya sabes donde está guardada.
PRINCESITA: (en tono alegre) gracias padre, te prometo que la cuidaré.
CONTROL: se escuchan varios pasos rápidos, simulado que la princesa esta corriendo.
NARRADOR: la princesita muy alegre se dirigió hacia el bosque, cuando estaba jugando con su pelotita se le cayó al suelo y se fue rodando rodando, hasta caer en la laguna.
CONTROL: sonido de un objeto rodando y un chapuzón en el agua. Después se escucha el llanto de la princesita
NARRADOR: La princesita corrió tras de ella pero la pelota se sumió hasta el fondo, la princesita se puso a llorar pensando que ya nunca podía volver a jugar con su linda pelota de oro, cuando de repente oyó una voz muy rara que decía:
SAPO: ¿qué te pasa princesita, por qué lloras tanto?
PRINCESITA: (llorando) ¿quién habla, de quién es esa voz?
NARRADOR: en ese momento apareció un sapo verde y gordo que andaba brinque y brinque alrededor de la princesita.
CONTROL: se escucha el croar del sapo y luego su voz.
PRINCESITA: hay eres tu horrible sapo, lloro porque se me cayó mi pelota de oro a la laguna.
SAPO: cálmate, no llores más, yo la puedo sacar de la laguna y traértela, pero ¿qué me darás en cambio?
PRINCESITA: lo que tu quieras, mis vestidos, mis perlas y hasta mi corona de oro que llevo en mi cabeza.
SAPO: yo no quiero nada de eso, quiero ser tu amigo, sentarme en tu mesa y comer de tu platito de oro, beber de tu vasito de agua y dormir contigo en tu camita.
PRINCESITA: si, si, te daré todo lo que quieras, pero devuélveme mi pelota.
SAPO: ahora mismo voy por ella
PRINCESITA: (con voz de ironía) pobre sapo gordo y feo, quiere ser como las personas
CONTROL: se escuchan los brincos del sapo y el chapuzón en el agua.
SAPO: aquí está la pelotita.
PRINCESITA: gracias
CONTROL: se escuchan los pasos agitados de la princesa.
NARRADOR: en ese momento se fue corriendo la princesita con su pelota para su palacio.
SAPO: espera, espera llévame contigo, no puedo alcanzarte
NARRADOR: al día siguiente estaba la princesita en la mesa junto con el rey y todas sus hermanas, comiendo en su platito de oro. Escuchó que algo subía por las escaleras y llamaron a la puerta.
CONTROL: se escuchan los brincos de la rana y luego los golpes de la puerta.
SAPO: princesita ábreme.
CONTROL: se escuchan los pasos de la princesa bajando las escaleras y el sonido de la puerta.
PRINCESITA: ahhhh, eres tu horrible sapo, no te dejaré entrar.
NARRADOR: y subió corriendo las escaleras y entró en el comedor con el corazón que latía fuertemente y se sentó a la mesa.
REY: ¿qué te pasa, acaso hay un gigante en la puerta?
PRINCESITA: no, es un sapo que quiere entrar y comer de mi platito de oro porque ayer se cayó mi pelotita al agua y yo se lo prometí por habérmela rescatado.
REY: Lo que prometiste debes cumplirlo, ábrele la puerta al sapito.
CONTROL: se escuchan nuevamente los pasos de la princesa bajando las escaleras y el sonido de la puerta.
NARRADOR: en cuanto la ranita entró, el rey le preguntó:
REY: sapo ¿es verdad lo que dice mi hija?
SAPO: Así es su majestad, pero la princesa se rehúsa a cumplir la promesa que me hizo.
REY: no te preocupes más sapito, ya que mi hija cumplirá su palabra
.
NARRADOR: en cuanto el rey hubo hablado, la ranita empezó a comer en el platito de oro de la princesita.
CONTROL: se escuchan los sonidos de los platos.
SAPO: ya comí bastante, ahora llévame a tu cuarto. Acuérdate que me prometiste que dormiríamos juntos.
NARRADOR: la princesita no quería dormir con el sapo, ya que su cuerpo era frio y húmedo
REY: hijita, recuerda que debes cumplir tu promesa, la palabra de una princesa es la palabra
de nuestro reino.
NARRADOR: y la princesita sin más remedio, tuvo que llevar al sapo a su habitación.
PRINCESITA: (mal humorada) yo no quiero dormir contigo sapo feo, si tu quieres duérmete en mi cama, yo me acostaré en el suelo.
SAPO: pero tu me lo prometiste hermosa princesita, recuerda que rescaté tu pelotita de oro.
CONTROL: se escuchan los brincos del sapo.
NARRADOR: y la ranita brinco a la cama de la princesita.
SAPO: (en tono de suplica) ahora dame un besito, por favor, hermosa princesita.
PRINCESITA: ( con tono molesto) ¡cómo se te ocurre horrible sapo!
SAPO: recuerda las palabras de tu padre, lo que prometiste debes cumplirlo, o quieres que lo llame.
PRINCESITA: (en tono bajo y de mal humor) está bien, pero solo será uno y me dejarás en paz.
CONTROL: se escuchan el sonido de un beso.
NARRADOR: en ese momento algo maravilloso sucedió. El horrible sapo se convirtió en un hermoso príncipe. La princesita se quedó asombrada.
PRINCESITA: (sorprendida) ¡cómo, el feo sapo se convirtió en un príncipe!
PRINCIPE: así es princesita y nadie más que tú pudo romper el encanto. Un hada mala me convirtió en sapo y me arrojo a la laguna y solo una princesita como tú me podría desencantar
NARRADOR: la princesita feliz de ver al príncipe llamo a su papá a y toda la corte y en medio de una gran fiesta llena de luz y alegría se celebraron las bodas y el príncipe se llevo a la princesita a vivir en un palacio maravilloso.